Pero yo lo hice sonar, con una guitarra nacida en Madrid, con alguien que sonreía y que nunca me acompaño a nada en Barcelona. Un garaje donde guardar la esperanza, ahora sonrío, y sonrío con fuerza, quiero ser. Nunca tendría que dejar de haber sido.
http://www.tedormimos.com/colchones-viscoelasticos/ |
Y los escenarios cambian, pero las personas no. Me vuelvo a reconocer después de todo, y nadie ha visto un no por respuesta últimamente. Quiero dar el sí que yo mismo me negué, vayamos andando a tomar una caña, vayamos caminando a reconocer los rincones de la nuva rutina.
Hasta pronto plazas, hasta pronto aceras, hasta pronto valles. Allí os quedareis y allí me vereis de nuevo, pero ya no me conocereis porque todo tiene unas consecuencias, las mías se están dibujando.
No sentí una nueva oportunidad donde siempre, a partir del lunes la buscaré donde nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario