Clases de salsa en Malaga

La vida: Todo un desafío... Nada fácil... Esta última semana se me hizo bastante pesadita. Muchos cambios, en su mayoría positivos, y algún que otro problemita aparte que hacen que mi estado de ánimo varíe.. Me gusta estar alegre, con una sonrisa y siempre con un chiste bajo la manga. Pero mas allá de las ganas de estar bien y de querer superar todo tipo de situación, a veces no es fácil mantener la sonrisa... Me cuesta mucho adaptarme a los cambios, aunque creo que a la mayoría de las personas les debe pasar lo mismo. Me da mucha inseguridad pisar nuevos terrenos, tomar decisiones y lo mas dificil mantenerlas. Me gustaría, por lo menos de vez en cuando, que la vida no se me hiciera dificil de llevar. No me es tan fácil como le parece a los demás salir a la Clases de salsa en Malaga.

 La mayoría de las personas que me conocen o conviven conmigo creen que por tener un caracter alegre, por ser sociable y demás; salgo a flote de cualquier situación con total facilidad; y la verdad "no es así"... Paso horas del día pensando si hacia donde voy es el camino correcto, si estoy bien en donde estoy o si algún día llegaré a lo que creo que mas me conviene. Se que para la mayoría de los porque casi nunca hay respuestas. Pero de todos los "Porque" uno es el que mas me limita. ¿Por qué el pasado puede influenciar tanto en mi presente y en mi fuente?...

Cada vez que tengo que determinar algo en mi vida me limitan un montón de miedos, me surgen preguntas y mas preguntas, y la mayoría me llevan a los mismos miedos... Se que seguramente no encuentre las respuestas a esas preguntas, pero me encantaría que en algún momento de mi vida, pueda decidir sobre mi futuro sin atemorizarme por mi pasado... A veces todo me resulta demasiado dificil, pero que puedo hacer?... Hay que seguir adelante. El pasado pasó. Superarlo??? Me encantaría... Algún día voy a lograrlo. Mientras tanto voy a hacerle frente a mis miedos aunque solo yo se lo que siento y lo que me cuesta... Espero en algún momento encontrar respuestas, al menos algunas...

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Comunidad de mascotas

..Y entre las maletas aún no hechas, entre la casa que arrendamos con más ganas que certezas, entre el sonido del viento fueguino pegando todavía en la frente, entre el susurro de palabras bien dichas, entre recuerdos de sólo dos personas solas en este fin del mundo, entre este sur crudo, agobiante, en medio de una lejanía isleña, al otro lado de un charco, en medio de los brazos, de esos brazos de siempre, yo, me despido.

Vuelvo a Chile. Vuelvo a casa. Vuelvo mi gente. Vuelvo a mi Comunidad de mascotas.

Mi trabajo en el diario acaba hoy. La despedida fue mesurada pero amena, tranquila pero afectuosa, sólo mi jefe directo acusó el golpe de despedir a su primera periodista en práctica. Si esto fuera un lugar común, estaría guardando mis cosas en una caja de cartón, la cargaría en los brazos mientras paso por el pasillo y me despiden con deseos de fuente.

No. No fue cinematográfico, ni novelesco. Dejo mi trabajo de la misma forma en que lo tomé: como una chilena demasiado callada para las raíces italianas de estos argentinos, a la que de poco terminaron apreciando. Y yo a ellos. Mi jefe directo me obliga a volver el Lunes para hacerme entrega de una carta de recomendación, mientras poco a poco borro las pequeñas huellas de mi breve paso por acá: una taza de café aconchado, un pinche negro, una bufanda y una carpeta de fotos en el escritorio del pc. Vuelvo, entonces. Pese a que es un lugar común, nunca he sido buena para las despedidas, pero hoy, a fines de Abril, agrego que tampoco lo soy con las bienvenidas.

Lo veo desde Chile. ¿Qué bello no?. Me llevo hartas cosas, que quizás detalle con el tiempo, pero también a un grupo de gente bella que se acerca a mí gracias a un humilde blog. Hoy más que nunca, leerlos me hizo bien. Chao desde Argentina, que me vuelvo para Chile. Y como dijo Bolaño, tu familia es tu Patria.